Camina con la manada

Imagínate ver una manada de elefantes en las calles concurridas de la Ciudad de Nueva York. Es difícil de creer, pero, en 2024, 100 esculturas de elefantes de tamaño natural se apoderaron del centro de Manhattan. Las esculturas gigantescas formaban parte de The Great Elephant Migration (La gran migración de elefantes), un proyecto de arte público que ahora viaja por todo el país. El proyecto recauda dinero para la conservación de la vida silvestre. Y anima a las personas a convivir de forma responsable junto a los animales.

LEJOS DE CASA Los elefantes están en medio de las calles bulliciosas de la Ciudad de Nueva York.

Fiona Humphrey es cofundadora del proyecto La gran migración de elefantes. Quiere que la gente interactúe con los elefantes. (¡Sí, puedes tocarlos!) Humphrey le dijo a TIME for Kids que espera que los visitantes se pregunten: “Si estos elefantes vivieran en mi patio de atrás, ¿cómo sería?”.

Gigantes serviciales

La gran migración de elefantes apareció por primera vez en el Reino Unido y la India. En julio de 2024, las esculturas aterrizaron en Estados Unidos. Se instalaron por primera vez en Newport, Rhode Island. Desde entonces, han pisado fuerte el pavimento de la Ciudad de Nueva York y se destacaron en una playa de arena en Florida. Está previsto que los elefantes aparezcan en Texas, Wyoming y Montana antes de completar su gira por Estados Unidos en Los Ángeles, California, este verano.

PRIMERA PARADA La gran migración de elefantes comienza su gira por Estados Unidos con una parada en Newport, Rhode Island, en julio de 2024.

A medida que las esculturas viajan por todo el mundo, se venden a coleccionistas de arte. Se añaden nuevos elefantes a la manada antes de que llegue a su próximo destino. El dinero obtenido de las ventas se dona a proyectos de conservación en todo el mundo.

HUELLAS GRANDES Los visitantes posan con esculturas de elefantes en Miami Beach, Florida, en 2024.

Muchos de los proyectos de conservación elegidos están dirigidos por o apoyan a personas y comunidades indígenas. “Somos una organización centrada en los indígenas”, dice Humphrey.

Idea salvaje

Tarsh Thekaekara es un científico e investigador. Fue cofundador del Real Elephant Collective, un grupo de 200 artesanos de todo el sur de la India. Estudian a los elefantes y crean las esculturas a mano.

Las esculturas tardan de uno a tres meses en hacerse, dependiendo de su tamaño. Son tan grandes como los elefantes reales, algunos de hasta nueve pies de altura. Están hechos de una planta llamada lantana, un arbusto invasor que ha estado destruyendo los hábitats de la vida silvestre en la India.

GRANDES Y PEQUEÑOS Cada escultura de elefante se basa en un elefante real que vive en el sur de la India.

Los artesanos de Real Elephant Collective convierten la lantana en arte. Primero, retiran la planta del suelo. Luego secan el arbusto y lo usan para crear detalles únicos, como ojos de elefante e incluso las uñas de las patas. El uso de la planta como material artístico “es quizás la única forma en que podemos hacer retroceder la propagación de la lantana”, dice Thekaekara.

MUY REALES Un artesano de Real Elephant Collective trabaja en la escultura de un bebé elefante.

Cada escultura es única, basada en un elefante salvaje real que vive en la Reserva de la Biosfera de Nilgiri, en el sur de la India. Allí, las personas y los elefantes conviven (ver “El elefante vecino”). “El hecho de que la gente pueda convivir con animales como este es bastante sorprendente”, dijo Thekaekara a TFK.

La mayoría de nosotros no vivimos entre elefantes. Pero todos podemos pensar en cómo coexistimos con la vida silvestre en nuestra comunidad. Si la gente de la India puede vivir entre “el mamífero terrestre más grande del mundo”, dice Thekaekara, “seguramente podemos vivir con todo, ¿verdad?”.

El elefante vecino

Los elefantes indios no son como otros elefantes. Son más pequeños, por un lado. Pero los animales que inspiraron La gran migración de elefantes tienen otra cualidad inusual: viven junto a las personas en el sur de la India.

El hábitat de los elefantes se ha visto afectado por la deforestación. Con menos lugares a donde ir, los elefantes comenzaron a llegar a las aldeas humanas. La gente todavía está descubriendo cómo vivir con sus nuevos vecinos.