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En necesidad de reparación

RICH PEDRONCELLI—AP

Arreglar los caminos, puentes y suministro eléctrico de nuestra nación será un esfuerzo masivo y costoso. ¿Está Estados Unidos listo para hacer el trabajo?

Casi hace 150 años, trabajadores martillaron el último barrote en las vías ferroviarias transcontinentales de Estados Unidos, uniendo al país de costa a costa. Luego, se hizo la Gran Terminal Central, una estación de trenes opulenta en la Ciudad de Nueva York. El Puente Golden Gate, en San Francisco. El listón interminable de carreteras interestatales. Estos logros de ingeniería se convirtieron en monumentos de la ingenuidad y poder americanos.

ROAD REPAIR It could cost $57 billion to fix California’s highways.

RICH PEDRONCELLI—AP

Ahora, muchos símbolos de la fuerza de EE.UU. se están derrumbando. Cada cuatro años, la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles evalúa la condición de nuestros caminos, vías ferroviarias, puentes y aeropuertos. El reporte también califica nuestro suministro eléctrico y de agua. En la tarjeta de calificaciones de la infraestructura de 2017, EE.UU. recibió una D+.

El Presidente Donald Trump dice que tiene la intención de gastar grandes cantidades de dinero en la reconstrucción. En junio, anunció su plan de infraestructura. Dice que el gobierno federal invertirá $200 mil millones durante los próximos 10 años. La inversión privada y contribuciones de los gobiernos estatales y locales, dice, agregarán $800 mil millones, lo que llevará a un total de $1 billón.

“Juntos lo arreglaremos”, dijo Trump en un evento en Cincinnati, Ohio. “Crearemos una infraestructura de primera clase que nuestro país y ciudadanos se merecen”.

Modernización de Estados Unidos

Además de dinero, ¿qué se necesitará para reconstruir EE.UU.? Hay más cosas que hacer que arreglar caminos y puentes. Requiere soluciones innovadoras. Se necesita invertir en tecnología y eficiencia. La imaginación también ayuda. Por instancia, la red eléctrica. Las actualizaciones modernas a la red no serán visibles. Ni las actualizaciones de tecnología que prepararán nuestras calles para conducir autos sin conductores. O las actualizaciones necesarias para llevar Internet de alta velocidad a 34 millones de estadounidenses que no la tienen.

TEAR IT DOWN A construction crew demolishes a crumbling bridge on California’s coast in March. It was damaged in a storm.

VERN FISHER— MONTEREY HERALD/AP

Claramente, estas actualizaciones no son monumentos físicos a la grandeza. Nadie hará un viaje a California para ver un edificio que es hogar de una planta de tratamiento de agua de alta tecnología. Pero los defensores de la inversión en infraestructura están de acuerdo: Estos son adelantos que llevarán a que nuestro país sea grandioso nuevamente.

Mientras tanto, otros países están haciendo un mejor trabajo en actualizar su infraestructura. EE.UU. tiene mucho terreno que recuperar.

¿Trato o no trato?

La mayoría de los estadounidenses apoyan la idea de una modernización de la infraestructura, inclusive si es costosa. Una encuesta reciente de CNN encontró que el 79% quería que el presidente gastara más en infraestructura. Los funcionarios estatales y locales de Hartford, Connecticut a Honolulu, Hawái, han creado listas de deseos de proyectos merecedores. Esperan atrapar la atención del presidente.

Trump necesitará la cooperación de los legisladores en ambos lados del pasillo para avanzar su plan de infraestructura. Él es un miembro del partido republicano. Los republicamos actualmente tienen control del Congreso. Pero probablemente desean reducir el gasto más que aumentarlo.

BUILD A BRIDGE A new high-tech bridge (left) replaces the old Tappan Zee Bridge, in New York.

NEW YORK STATE THRUWAY AUTHORITY

Trump ha dicho que los demócratas y republicanos tendrán que unirse para completar la tarea. “Necesitamos miembros de ambos partidos, en conjunto con la industria y los trabajadores, para unirnos para reparar, reconstruir y renovar la infraestructura de Estados Unidos”, dijo Trump en una declaración a TIME la primavera pasada. Al cierre de la edición, sin embargo, todavía no se ha presentado ningún proyecto de ley de infraestructura en el Congreso.

Mientras que Estados Unidos espera un plan, deberíamos pensar más profundamente sobre cuánto dinero debemos gastar y cómo gastarlo. Las mejores inversiones de infraestructura comienzan con la imaginación. Son las apuestas audaces en el mañana.