Equipo Frailecillo

Heimaey es una isla pequeña en la costa de Islandia. Cada primavera, más de un millón de frailecillos atlánticos visitan Heimaey y sus islas vecinas. Van ahí a tener crías. Los frailecillos construyen nidos en los acantilados en la costa. Luego, dejan el nido y vuelan al mar.

El instinto les dice a los frailecillos que sigan la luz de la Luna al océano. Pero las aves puedenconfundirse por las luces brillantes de Heimaey. Vuelan hacia las luces en vez de la Luna.

Un frailecillo adulto posa en un acantilado en Islandia.

Muchos frailecillos se pierden. Automóviles pueden golpear a estas aves. Gatos se comen algunas. Las aves necesitan ayuda.

Niños ayudantes

Los niños en Heimaey han formado un equipo para ayudar a los frailecillos. Cada temporada de cría, los niños forman grupos de búsqueda. Llevan linternas y cajas de cartón. Son conocidos como la Patrulla Frailecito.

Niños en Islandia liberan frailecillos rescatados al lanzarlos hacia el océano.

“Cuando ves a un ave, tratas de arrinconarla y dirigirla hacia la caja”, dijo Eldur Hansen a TIME for Kids. Él tiene 15 años. Eldur ha atrapado varias aves de esta manera. Nadie sabe cómo comenzó la Patrulla Frailecillo. Pero cada año, rescata miles de crías.

Frailecillos en necesidad

La Patrulla Frailecillo lleva a los frailecillos rescatados a la playa. Pero primero, los niños llevan las aves a un acuario. Ahí, pesan y etiquetan a los frailecillos. Esto ayuda a los científicos a aprender más sobre los frailecillos.

Los frailecillos son una especie vulnerable. Esto significa que pronto podrían estar en peligro de extinción. Pero Stephen Kress dice que la Patrulla Frailecillo les da esperanza. Kress es un conservacionista. “Las personas pueden hacer una diferencia”, dice.