Música para el pueblo
Gustavo Dudamel regresa al escenario para un segundo bis. Es la noche de apertura de la Filarmónica de Los Ángeles, en California. Cuando la multitud ve al director de orquesta, el volumen adentro del Salón de Conciertos Walt Disney aumenta repentinamente. Dudamel se para en el podio, reclina su cabeza y levanta sus brazos. La orquesta comienza la apertura de la banda sonora de la Guerra de las Galaxias. Al final, la audiencia se pone de pie. Es el tipo de reacción que uno esperaría en un concierto de Taylor Swift.
ROBERT TORRESLa música no es meramente entretenimiento. Dudamel dice más tarde. Nos puede transformar. “Estás sentado ahí para una sinfonía que dura 30 o 50 minutos, y el tiempo se desvanece”, él dice. “Estás en una experiencia de armonía y belleza. Nos une, incluso si llegamos sintiéndonos completamente diferentes”.
Bajo el liderazgo de Dudamel, la Filarmónica de L.A. ha repartido el poder de unificación de la música de orquesta a través de las divisiones de ingresos, clase, color, género y edad.
La orquesta es conocida por tocar con estrellas del pop como Billie Eilish, quien atrae a una audiencia más joven. Y su Orquesta Juvenil de Los Ángeles (YOLA, por sus siglas en inglés) ha trabajado con más de 1,500 niños, proveyéndoles instrumentos y lecciones para que puedan tocar en un escenario. (Lee “La música clásica es genial”). Para Dudamel, la música de orquesta es una forma de arte de la que nadie debería ser excluido.
SAM COMENUna educación musical
Dudamel creció en una familia de clase trabajadora en Venezuela. Su mamá era profesora de canto. Su papá tocaba el trombón en un grupo de salsa. Pero quizás lo más importante para el desarrollo musical de Dudamel fue la familia que encontró en El Sistema. Este es un programa nacional de Venezuela de educación de música clásica y actuación para jóvenes en desventaja. Dudamel se unió cuando tenía 5 años. Fue El Sistema el que, tres años más tarde, colocó un violín en sus manos.
El programa YOLA se lanzó en 2007, después que Dudamel mostró el trabajo de El Sistema en Venezuela a los miembros de la organización de la Filarmónica de L.A. Él les presentó al fundador del El Sistema, José Antonio Abreu. Para muchos de los músicos de YOLA, Dudamel se ha convertido en lo que Abreu fue para él: un maestro, un alentador y un recordatorio de lo que puede lograrse.
PAUL CRESSEYCreación del futuro
Las raíces que Dudamel arraigó en Los Ángeles se han extendido más allá del Salón de Conciertos Disney. En octubre de 2021, el Centro Beckmen de YOLA abrió sus puertas en Inglewood, California. El edificio de un banco antiguo se había convertido en un lugar para lecciones, grabaciones y actuaciones. La primera visita de Dudamel al centro incluyó paradas en dos lugares de conciertos llenos de luz. El director de orquesta se puso a llorar.
PAUL CRESSEYDudamel recuerda algo que Abreu le dijo una vez: Los músicos jóvenes del El Sistema no deberían tener un programa que es “lo suficientemente bueno”. Deberían recibir los mejores instrumentos, los mejores maestros y los espacios más inspiradores para crecer y prosperar.
PAUL CRESSEY¿La lección para Dudamel? “Den a estos niños los recursos y crearán su propio futuro, su propia dimensión”, él dice.
Obi-Wan Kenobi no podría haberlo dicho mejor.
La música clásica es genial
ANTHONY BEHARTocar en la Orquesta Juvenil de Los Ángeles requiere mucho trabajo arduo. Además, ofrece oportunidades emocionantes. En 2016, YOLA tocó en el Súper Bowl 50. El grupo inició el medio tiempo junto con la banda británica Coldplay. Bruno Mars y Beyoncé cantaron después.
En un ensayo, los estudiantes esperaban ansiosamente la experiencia. “Amo el fútbol americano”, dijo uno de ellos. “Y poder tocar en ese escenario, como todos los otros artistas, es maravilloso”. —Por Jaime Joyce